martes, 19 de mayo de 2020

La prueba PISA y el liderazgo de China


Para Milenio Jalisco
Esteban Garaiz
17 de diciembre 2019

Está divertido. De ninguna manera esta nota pretende echar marcha atrás de la posición en contra de que la educación que hay que impartir a la niñez mexicana, se reduzca a la mera formación- información profesional, tal como propugna y valora la OCDE a través de la prueba escolar PISA.
Pero resulta muy ilustrativo fijar la atención en los resultados publicados en una nota de Olga R. Sanmartín fechada en Madrid y publicada en El Mundo, 4 de diciembre (encartado en Milenio Diario Jalisco).
La nota presta atención especial a los resultados escolares españoles: en una escala de 19 países. En ella se comparan los resultados en matemáticas.
En esa escala de resultados aparece China en primer lugar con 591 puntos, seguida de Singapur con 569, Japón con 527, Corea del Sur 526, Estonia con 523, Holanda con 519, Polonia con 516 y Suiza con 515.
A continuación, aparecen Eslovenia con 509, Finlandia con 507, Reino Unido con 502, Alemania 500 y Francia con 495.
Sigue la escala: Portugal con 492 puntos en matemáticas, Italia 487, Lituania 481, igual que Hungría con 481. Al final de la tabla aparecen: España también con 481 puntos y Estados Unidos a lo último con 478 puntos en la valoración de matemáticas.
México no aparece en la tabla citada.
Resultados muy parecidos se observan en la prueba de ciencias; donde China sigue en primer lugar con 590 puntos, Alemania queda en el lugar 11 con 503, Estados Unidos en el puesto 12 con 502 puntos y España en el lugar 16 con 483 puntos; seguida de Lituania, Hungría e Italia.
Hasta a la OCDE le va quedando claro que no es necesariamente lo mismo: crecimiento económico medido en cualquier moneda nacional (aun con pretensiones de referencia mundial) que lograr desarrollo social íntegro en una convivencia nacional e internacional.
Pero que, efectivamente, los conocimientos básicos de la niñez escolar en materia de ciencias y de matemáticas pesan en la productividad de una nación entre las causas principales.
De poco le van a servir a Donald Trump los muros, los aranceles, la pretendida propiedad intelectual o las insensatas pretensiones de interrumpirle (por ejemplo) la cadena productiva a Huawei.
Ya sólo falta que quiera cobrar propiedad intelectual por el cero matemático de la numeración árabe, que llegó a Europa por la Córdoba morisca en el año de 1300 de la era cristiana (los romanos no conocieron el cero).
Ya los chinos han ganado la carrera: de la escolaridad y de la capacidad económica. Con la férrea rectoría del Estado y utilizando el mercado.
Pero hay que insistir en que no se puede, por ningún concepto, reducir la educación al mero aprendizaje de conocimientos científicos y habilidades matemáticas.
En nuestro caso, el artículo tercero del Pacto Nacional es contundente y lúcido: “La educación que imparta el Estado tenderá a desarrollar armónicamente todas las facultades del ser humano y fomentará en él, a la vez, el amor a la Patria, el respeto a los derechos humanos y a la conciencia de la solidaridad internacional, en la independencia y en la justicia”.


Entrevista sobre la política energética actual, en México.

Entrevista, que me hacen los periodistas Rubén Martín y Jesús Estrada, sobre la política energética en el actual gobierno.  https://mx.ivoox...